El dibujo es una de las materias que más asusta cuando uno quiere emprender el estudio del diseño.
La gente, lo primero que dice o piensa es: «¡Yo no sé dibujar!” , ¡»Yo no voy a poder!»
Pero la buena noticia es que sí se puede, todos pueden aprender a dibujar.
Para hacerlo se necesitan cuatro cosas: voluntad, lápiz y papel y un docente con vocación de enseñar.
El docente está, las herramientas: tableros de dibujo, lápices, escuadras, gomas, cintas, papel, escalímetro, también están.
Solo faltas vos y tus ganas.
A dibujar se aprende, a pensar se aprende, con una buena guía todo se aprende.
Nuestro curso está orientado a aquellas personas interesadas en el diseño y la decoración. Para aquellos que lo proyecten como una profesión en el futuro, para actualizarse en el rubro o para desplegar todo el potencial creativo que todos tenemos.
Pero para todos ellos el dibujo es imprescindible como medio de comunicación.
Es la herramienta que nos permite controlar si mi propuesta de diseño funciona bien o necesita ajustes y modificaciones.
Aunque ese dibujo quizás nunca llegue a manos del cliente, para nosotros es necesario para ir desarrollando el proceso de diseño.
Tengo más buenas noticias: el dibujo técnico, o dibujo arquitectónico, es muchísimo más fácil que el dibujo artístico.
Partamos de la base que en arquitectura casi todos los espacios son ortogonales (significa que tienen ángulos rectos).
Entonces piensen:¿qué es más fácil dibujar: un caballo o un rectángulo?
Obvio que la respuesta es el rectángulo.
Y ni les cuento si ese rectángulo se hace en un tablero con reglas especiales que trazan horizontales paralelas entre sí. Y que si a eso le sumamos una escuadra apoyada, logramos los tan amados 90* que necesitamos para nuestro dibujo.
En conclusión: tenemos un 99% de chances que el rectángulo nos salga perfecto.
No digo el 100% porque siempre algo puede fallar. Pero eso se puede ajustar.
Pero que va a resultar factible y divertido, se los puedo prometer.
Llevo 26 años enseñando a dibujar a cientos de alumnos sin conocimientos previos, que nunca dibujaron y hemos obtenido resultados altamente satisfactorios.
Me complace decir que todavía no conozco a nadie que no haya aprendido a dibujar.
Y te aseguro que no serás el primero.
Susana Hernández, directora de sede Pilar de Diseño & más